Entre la creatividad y las cuentas a pagar ¿Cómo se financian los actores? Hablamos con Laura Veiga

     Laura Veiga, artista de la danza y el teatro, con experiencia nacional e internacional, incansable gestora del   teatro para Merlo, nos dice: “la actividad teatral es muy endeble y en Merlo nadie vive sólo de eso”

     Laura diferencia entre la plata “para vivir” y la plata para hacer teatro.  En su caso la plata para vivir proviene de sus trabajos como docente  en el Colegio Santiago Besso y  de su trabajo en la Casa del Poeta.  En cuanto a su  tarea artística, su proyecto está relacionado con el   apoyo del Instituto Nacional del Teatro, aporte que permite afrontar los gastos para que las obras se realicen,  pero no representa una ganancia   significativa para actores, directores, técnicos, etc.   

Dice Laura:  “lo que es teatro lo pago con subsidios del INT. El INT ayuda un montón para las cuestiones teatrales pero no vivís de eso. La actividad teatral es una actividad muy endeble, acá en Merlo nadie vive de eso, hay que tener un trabajo aparte. Esto se  ha visto en la pandemia, que la gente que no tenía un trabajo fijo o no estaba en blanco se la vio difícil a pesar de los subsidios que salieron que fueron un montón”. “Este año también salieron un montón de planes del INT. “Horda”, que es la obra que estoy haciendo y que hacía antes, entró en estos subsidios y se pudo seguir trabajando. Los  subsidios son  para compañías o para grupos que se arman especialmente, lo que es un subsidio de producción de obra depende de la categoría que tengas, un jurado lo elige y valora si tenes trayectoria; si te sacas 7 tenes un 70% de lo que sería el subsidio, si te sacás 8 sería el 80% y si te sacas 10 tenes el total. El grupo “Maraña” al que pertenezco tiene 20 años de trayectoria, entonces llega al total de los subsidios”. 

             De todos modos, los subsidios recibidos llegan apenas a cubrir los gastos de producción , y pagar a los que trabajaron,  pero los actores por ejemplo ,  cobran una suma que no cubre   los ensayos,   alcanzan apenas para  pagarle a una persona para que te haga un video para  presentar en los festivales, a la que   hace el diseño de música pero apenas si alcanza para pagarles lo mínimo.  El subsidio máximo que le dieron a “Horda”, por ejemplo  fueron $150.000,   eso se repartió para  18 bailarines que recibieron $5000 por todo el proceso que duró 3 meses.

      Noches Merlinas,  iniciativa de Laura que permitió, durante 19 años traer teatro a Merlo cuando aquí no había nada, recibía siempre el máximo del subsidio y con esos recursos  se hacían un montón de funciones y con esa plata se le pagaba a los grupos que se invitaban, se  pagaba el equipamiento técnico, los pasajes, a los profesores que daban clases , los alojamientos etc.  Laura cuenta que las Noches Merlinas , que se llevaron adelante hasta la pandemia, no  retornarán: “ahora con el teatro Amigos de Merlo hay oferta de teatro, entonces toda la gestión que yo hacía para Noches Merlinas la pongo para Amigos de Merlo y empiezo a organizar funciones y que vengan grupos de teatro, todo lo mismo pero a lo largo del año, no dentro de un festival.”

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 En algunas provincias los gobiernos provinciales hacen un aporte que se suma al del INT. En San Luis se trabaja para que se saque una Ley de Teatro Provincial, para que el aporte del estado sea transparente y sostenido, y que los subsidios se otorguen por convocatoria, con un jurado seleccionador que elija y subsidie de manera transparente. Si el aporte de provincia se sumara al de nación las cosas serían diferentes.