COMENTARIO SOBRE LA OBRA QUE SE PRESENTÓ EN LAS NOCHES DE TEATRO «Pedacitos de mí» : «pedacitos de escena” para construir la liberación de un ser.

En oportunidad de realizarse las «Noches de Teatro» en la Casa del Poeta en mayo de este año,se presentaron distintas obras de elencos locales. Los integrantes del Grupo «Marañas» quisieron tener una devolución profesional de cada una de las obras que presentaron . En el caso de la obra «Pedacitos de mí» , esta fué la opinión de la crítica Andreína Benitez:

Como todos sabemos, no hay arte sin espectador. Este fenómeno es indiscutible. Nos agrada la tarea de hacer una devolución a los artistas, ya que solo tienen una visión “interna” del devenir de la obra.
Me gustaría comenzar con una obra de teatro que ha sido patrimonio de la Noche de los Teatros el día 12 de mayo de este mismo año.
Esa noche, “pedacitos de mí” corría en los escenarios de la Casa del Poeta y otras obras, de las que después también hablaremos, actuaban frente a otros públicos.
He visto la obra varias veces, pero debo reconocer que la repetición, es enriquecedora, para todxs. Me gusta jugar a ver lo nuevo, lo espontaneo, lo que se pule función a función, y eso me agradó mucho del día en cuestión.
A diferencia de otras veces, Macarena Montivero, la actriz de este unipersonal, se permitió jugar más que otras veces sin especular. Quizás, únicamente con la necesidad de romper la cuarta pared, como la ha ocurrido en puestas anteriores. Esta vez, sobre un escenario tradicional, jugó e impulsó al público a romper con la “formalidad polarizada” imponiendo quiebres.
Macarena, anda flotando por las aguas de su imaginación existencial, amarrada a un objeto, tan sencillo como una silla (pero que simboliza tanto para nuestra cultura occidental). También la quiebra. Desdibuja el mueble, lo transforma, de la misma manera que juega con el devenir de sus textos. Viaja incesantemente a no se sabe dónde.
Quiere y muestra como romper lo que condiciona, (el escenario, la silla, las amarras) que sujetan, los discursos, su propio discurso. También lo rompe, “desnaturaliza” el monologo, lo somete a juegos lógico-verbales.Somete los movimientos al límite del desequilibrio.
Así está pensada esta obra, como una tensión donde uno es testigo y trata de seguir la línea de corte con su pequeña tijera para jugar a armar y luego, obviamente festejar laliberación de este personaje. Los invito a tener presente esta obra para ver o reincidir en ella. Laura Veiga, dirige y actua por Macarena Montivero, dos joyitas de nuestra Villa Merlina.